“Transformaciones agrarias”: el legado de Marcela Román
El 1 de septiembre se presentó el libro “Transformaciones agrarias argentinas durante la última década. Una visión desde Santiago del Estero y Buenos Aires” en el Salón de Actos de la Facultad.
No hay concepto más acertado para referirse a un libro que hablar de legado, un capital de conocimiento para las generaciones presentes y futuras, una porción de saber que es a su vez una contribución al conocimiento y la formación. La presentación de un libro y su legado es la mejor forma de homenajear a una persona que dedicó su vida a la docencia y a la investigación. Este es el caso de Marcela Román que, gracias a su gran vocación y capacidad de entrega, supo sembrar muchas semillas, incluso hasta los últimos momentos de su vida. “Transformaciones agrarias argentinas durante la última década. Una visión desde Santiago del Estero y Buenos Aires” fue su último gran proyecto junto a María del Carmen González. El libro, publicado por la Editorial de la Facultad de Agronomía, trata sobre la expansión del cultivo de soja ”que se enmarca en un proceso complejo de expansión del capitalismo agropecuario argentino, que ya no puede explicarse como una intensificación pampeana versus una "extensificación" extrapampeana. En este volumen queremos, en consonancia con ello, aportar un conjunto de estudios realizados en Santiago del Estero y Buenos Aires, basados en amplios relevamientos primarios, reuniendo materiales originales. Esperamos aportar al estudio empírico e interpretativo de las profundas transformaciones experimentadas por el desarrollo del capitalismo agrario granífero y bovino en dos ámbitos geográficos claves”. (1)
La presentación se realizó en el Salón de Actos de la Facultad con la participación de María del Carmen González, ex Profesora Titular de la cátedra de Economía Agraria; Clara Craviotti, socióloga, investigadora independiente del CONICET en la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA y profesora de la Maestría de Estudios Agrarios de FLACSO; Francisco Pescio, Ingeniero Agrónomo de la cátedra de Economía Agraria y Susana Soverna, socióloga, técnica de la Secretaría de Agricultura Familiar del Ministerio de Agroindustria y miembro de la cátedra libre de Estudios Agrarios “Ing. Horacio Giberti” de la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA.
Con unas emotivas palabras, el decano Rodolfo Golluscio se dirigió al público presente: “No voy a hablar desde el punto de vista académico. El libro que se presenta hoy es un acto de amor por parte de Marcela. Tenía todas las excusas para no mover un dedo, sin embargo cada momento en el que se sentía mejor se lo dedicaba al libro y a otras tantas cosas que nos dejó como legado. No lo hizo solamente por el sentido de la responsabilidad, lo hizo por amor, como todo lo que hacía en su vida”.
Por su parte Clara Craviotti describió la obra como un libro complejo, que tiene varias capas, y que a lo largo de sus páginas se puede ver que es el producto de muchos años de investigación donde participaron muchas unidades de investigación: “No es muy frecuente esa combinación de perspectivas interdisciplinarias. Al lector que le interesen los procesos sociales y económicos que acompañaron los procesos de expansión, va a encontrar datos muy interesantes. Aquellos a los que les interese cuestiones estrictamente económicas, por ejemplo la eficiencia de los distintos estratos de explotaciones, también va a encontrar material interesante. A lo largo del libro hay una apuesta muy fuerte para generar datos duros, cuantitativos y cualitativos, y fundamentar gran parte de las apreciaciones que se hacen. Una pregunta implícita en el libro es ¿cuáles sujetos se debilitan y cuáles se consolidan a medida que se produce la expansión del capitalismo en el agro?, pregunta clásica de la sociología rural. La permanencia de los campesinos en su territorio, su coexistencia con el modelo de agronegocio es el principal interrogante que atraviesa todo el libro”.
Para Francisco Pescio, uno de los investigadores participantes del proyecto, “la cuestión clave con la que nos interpelaba Marcela tenía que ver con los procesos que estaban ocurriendo en la región pampeana, que se venían investigando y que ya estaban descritos y eran conocidos. Mientras, había una gran pregunta ¿cómo se manifiestaban los procesos de transformación en lo no pampeano?”. Había que buscar nuevos lugares para analizar esos procesos y la Provincia de Santiago del Estero se mostraba como un caso modélico por las grandes transformaciones que se estaban visualizando en el sector agropecuario. “Un tema clave que veíamos en la zona es lo que tiene que ver con el ambiente, es decir el proceso económico interactuando con el ambiente. El proceso económico no como una cosa indiferenciada, sino con la búsqueda de comenzar a diferenciar estrategias o lógicas según los distintos tipos de productores, o según los tipos sociales presentes que no necesariamente eran productores. Para responder a mucho de estos interrogantes había que abrir el juego y buscar un trabajo interdisciplinario. Por otro lado no podíamos solamente quedarnos con los enfoques puramente cuantitativos. Era necesario buscar triangulaciones o interacciones con otras miradas más cualitativas”. En referencia al trabajo en equipo destacó: “todos fuimos cobijados por Marcela y su gran instinto maternal, ese amor marcado por su compromiso político y social. Todo este trabajo no es por el placer abstracto del conocimiento, sino como herramienta para la transformación social, para lograr una sociedad más justa y equitativa, no desde un voluntarismo vacío. Ese amor sigue vivo en las enseñanzas de Marcela que nos llevamos cada uno de los que estuvimos trabajando con ella”.
Susana Soverna realizó un breve recorrido por su trayectoria académica y profesional: “en el libro que estamos presentando hoy en 7 de los 11 capítulos está presente Marcela. Los ejemplos de su trayectoria dan cuenta del lugar que ocupó en el avance de los estudios agrarios. Queda claro que en ella se conjugaban bien las ciencias naturales con las ciencias sociales. Gracias a su agudeza intelectual le encontraba al problema una vuelta que no se nos había ocurrido, que cuando la presentaba parecía obvia y clara, pero era ella quien la encontraba. Marcela se distinguía por su generosidad y todos los que trabajamos con ella podemos dar testimonio de su capacidad para trabajar y de los esfuerzos que hacía por cumplir. Otra particularidad fue su compromiso y su humildad”.
