La FAUBA inauguró dos laboratorios para docencia
Se inauguraron dos laboratorios destinados para docencia en el Pabellón de Industrias Agrícolas, producto de un proceso de puesta en valor iniciado en 2009. Asistieron el decano Rodolfo Golluscio, el vicedecano Eduardo Pagano y el ex decano Lorenzo Basso.
Los laboratorios, denominados Santos Soriano y Jorge Molina en homenaje a dos figuras señeras de la historia de la Facultad de Agronomía, fueron inaugurados el 20 de mayo pasado en el Pabellón de Industrias Agrícolas (también conocido como de Industrias Lácteas) de la FAUBA. Estuvieron presentes el decano Rodolfo Golluscio, el vicedecano Eduardo Pagano, el ex decano Lorenzo Basso, y familiares y amigos de los homenajeados así como docentes de la Facultad.
“Para mí es una ocasión muy conmovedora inaugurar un laboratorio nuevo para docencia, una necesidad de la Facultad que, inclusive, nos fue planteada por la CONEAU en su momento y representó un esfuerzo muy grande”, comenzó el Ing. Golluscio y cedió la palabra al Ing. Pagano –quien fuera secretario Académico en la gestión anterior- y al Ing. Basso, iniciador de este proceso de puesta en valor del Pabellón. El Ing. Pagano, quien realizó su trabajo de intensificación allí, habló sobre la importancia de contar con dos nuevos laboratorios, hizo hincapié en la colaboración del secretario de Investigación Roberto Fernández para conseguir el financiamiento necesario y destacó la labor de los ingenieros Soriano y Molina.
Por su parte, el Ing. Basso señaló: “Es un gusto volver y ver que la gestión de Rodolfo continuó con lo que iniciamos en el 2009. Costó mucho, hubo muchas idas y vueltas porque este pabellón estaba casi irrecuperable, pero consideramos que era importante, por un tema de superficie ocupada cubierta, reflotarlo. Se obtuvieron fondos genuinos y se hizo. Creo que es un mérito también muy fuerte de esta gestión el haber podido cumplir esta obra porque era muy cara. Los felicito”.
Finalmente, Juan Antonio Soriano –sobrino del Ing. Soriano- y Blanca Quartucci de Molina –esposa del Ing. Molina- recordaron a los homenajeados. “Siempre era didáctico, siempre me enseñaba algo en sus conversaciones –expresó orgulloso Juan Antonio-. Para nosotros, en la familia, fue un gran valor y me pone muy contento que la Facultad también lo considere así”. Asimismo, Blanca manifestó: “Les agradezco profundamente este homenaje a mi marido. Quedo contenta porque sé que hizo realidad todos sus sueños a través de su entrega a la agronomía y también a la formación de sus alumnos”.
