Asumió Rodolfo Golluscio como decano de Agronomía de la UBA

Junto a la nueva vicedecana Marcela Gally, el ingeniero agrónomo inició el 7 de marzo su segundo mandato. En la ceremonia presentó los puntos claves de la gestión, destacó su compromiso con la educación pública y se refirió a las políticas nacionales vinculadas a la producción agropecuaria y los problemas ambientales.

En la Facultad de Agronomía de la UBA (FAUBA) se realizó la ceremonia de asunción de las autoridades que gobernarán la institución hasta 2018. El Ing. Agr. Rodolfo Golluscio asumió como decano e inició su segundo período; y la Ing. Agr. Marcela Gally, como vicedecana. Junto al vicerrector y rector electo de la Universidad de Buenos Aires, Dr. Alberto Barbieri, y el vicedecano saliente de la FAUBA, Ing. Agr. Eduardo Pagano, firmaron el acta correspondiente para llevar adelante la conducción de la facultad. 

Golluscio presentó como puntos claves de la gestión la función de la universidad en la sociedad y las normas que se deberán aplicar en la FAUBA. “El entusiasmo nos enciende. Hay tanto para desarrollar y fortalecer que de ninguna manera lo vivimos como una segunda parte, sino como una continuidad de lo que veníamos haciendo”, expresó.

Respecto a la visión política de la facultad, el decano afirmó que tiene una única posición definida: la de la defensa de la democracia, de los Derechos Humanos y de las instituciones democráticas. “La mejor manera de defender las instituciones democráticas es ejerciendo la democracia en el interior de la facultad”.

En relación a la educación pública, manifestó su compromiso y aseguró: “Hay que invertir en la educación, formando profesionales creativos y con juicio crítico, capaces de generar sistemas sustentables de producción de alimentos sanos, generando conocimientos básicos y aplicados, que resuelvan problemas de interés teórico y práctico y contribuyan con diversos actores sociales en el desarrollo de soluciones tecnológicas”.

Y agregó: “Es un orgullo pertenecer a la UBA, una de las pocas universidades donde confluyen tres elementos distintivos: excelencia, gratuidad e ingreso irrestricto. La sociedad invierte en la UBA porque asume que es formadora de ciudadanos conscientes y útiles, de agentes de cambio. Tenemos que hacer honor a esa confianza”.

Además, durante el acto Rodolfo Golluscio agradeció la presencia de los ingenieros agrónomos y ex decanos de la FAUBA: Carlos Mundt, Guillermo Murphy, Fernando Vilella y Lorenzo Basso; de las autoridades y consejeros de la UBA; y de los docentes, no docentes y alumnos de Agronomía.

“Nuestra facultad está capacitada para resolver problemas tecnológicos de importancia para distintos actores sociales. Tenemos que tomar partido en las polémicas políticas nacionales vinculadas a la producción agropecuaria y los problemas ambientales; generar conocimiento científico y contribuir al desarrollo de la tecnología”, dijo. 

También, le dedicó un recuerdo especial a los Maestros Soriano, Pascale, Valla, Cámara, Frank, León, Sánchez, Hall y Giberti, que con sus visiones ideológicamente diferentes, estuvieron sellados por la originalidad, el rigor científico y la honestidad intelectual y personal. “Tratamos de seguir su ejemplo en cada una de nuestras acciones”.

Y cerró el discurso saludando a todas las mujeres en su día y leyendo fragmentos de un mail que recibió de una alumna. “Creo que sus palabras sintetizan lo que queremos lograr. Tenemos el enorme poder de cambiar vidas, de llenarlas de felicidad, de generar ciudadanos sanos con ganas de cambiar el mundo.  Ya vimos que pasamos tiempos difíciles antes y aquí estamos, seguimos creciendo y seguimos poniendo lo mejor. Cada vez mejor”.

Para finalizar el acto, el vicerrector y rector electo de la UBA, Dr. Alberto Barbieri, agradeció en nombre de la Universidad de Buenos Aires el trabajo y sacrificio de la gestión “para conducir una institución tan compleja como es la Facultad de Agronomía”. También, se refirió a las nuevas autoridades y les expresó: “Nos une un objetivo común: nuestra universidad pública, gratuita, irrestricta y con calidad docente. La universidad somos todos, y la UBA es profundamente democrática y participativa, con gran nivel académico y científico”.