Tecnología nuclear para el desarrollo agrícola
Arthur Edison, director del departamento de Bioquímica y Biología Molecular de la Facultad de Medicina de la Universidad de Florida, ofreció un curso sobre Resonancia Magnética Nuclear en la FAUBA.
La Facultad de Agronomía de la UBA (FAUBA) recibió durante noviembre la visita del biólogo y biofísico estadounidense Arthur Edison, director del departamento de Bioquímica y Biología Molecular de la Facultad de Medicina de la Universidad de Florida, quien ofreció un curso sobre Resonancia Magnética Nuclear (RMN) y sus aplicaciones en la medicina y la agronomía en su Escuela para Graduados (EPG).
El Dr. Edison es uno de los máximos referentes mundiales en RMN y en el estudio, mediante esta técnica, de la metabolómica, a partir de la cual puede detectar e identificar compuestos químicos presentes en los organismos y determinar metabolitos que se acumulan como respuesta a diferentes tratamientos. Recientemente, su laboratorio se convirtió en el centro de investigación nacional de EE.UU. para el desarrollo de estas tecnologías, y recibió inversiones por 16 millones de dólares para avanzar en los estudios junto con el famoso Laboratorio Nacional de Los Álamos.
El investigador estadounidense visitó la Argentina por 30 días, invitado por el Dr. Jorge Zavala, profesor de la cátedra de Bioquímica de la FAUBA, y gracias a una beca de intercambio de profesionales de la Fundación Fulbright, para realizar proyectos de colaboración y ofrecer un curso de dos semanas sobre RMN a estudiantes graduados, principalmente agrónomos y biólogos.
“Hace 16 años que doy clases y este curso es uno de los que más disfruté”, aseguró, y consideró que el tiempo de cursada (durante 10 días, con jornadas de 4 horas) le permitió explayarse, conocer a los estudiantes, debatir y responder a todas las consultas. “Si bien los estudiantes no son especialistas en áreas vinculadas con la tecnología RMN, como pueden ser la física, la matemática o la informática, todos comprendieron el tema e hicieron muy buenas preguntas”, dijo. Tal es así que ya planea promover el intercambio de estudiantes argentinos en su laboratorio, donde hoy Sudamérica sólo está representada por Brasil y Perú.
En la Universidad de Florida, Edison estudia los metabolitos secundarios relacionados con enfermedades humanas, como el cáncer. Actualmente, sus trabajos se concentran en la enfermedad distrofia muscular de Duchenne, que afecta los músculos de jóvenes de aproximadamente 11 años, y que puede provocar la muerte cuando llega a comprometer el corazón. “Hasta hoy, sólo se puede detectar cuando aparecen los síntomas. Por eso buscamos un compuesto específico, que esperamos encontrar en la sangre o en la orina, para predecir la enfermedad y hacer tratamientos preventivos”, explicó.
“La Resonancia Magnética Nuclear es un fenómeno físico basado en las propiedades mecánico-cuánticas de los núcleos atómicos. También se refiere a la familia de métodos científicos que explotan este fenómeno para estudiar moléculas (espectroscopia de RMN), macromoléculas (RMN biomolecular), así como tejidos y organismos completos (imagen por resonancia magnética)”, detalló.
En el área vegetal, la RMN permitiría, por ejemplo, estudiar los metabolitos secundarios que inducen las plantas cuando son atacadas por un insecto. Al respecto, Edison señaló que si bien su laboratorio no se especializa en la agricultura, sí abarca aspectos relacionados y que están en línea con la FAUBA, como el estudio de Caenorhabditis elegans, que permitiría entender el mecanismo de ataque de otras especies de nematodos que representan una plaga para el cultivo de soja. En este caso, la RMN ayudaría a conocer las feromonas que utiliza el nematodo como señal de comunicación y establecer técnicas de control.
Por su parte, Zavala apuntó: “En la FAUBA también estudiamos interacciones que están relacionadas con la capacidad que adquieren algunos insectos para inducir las defensas de las planta, adaptarse y consumir ciertos compuestos tóxicos. Estamos interesados en detectar qué señales producen los insectos, para aumentar las defensas contra el ataque de plagas”.
Ambos científicos se conocieron en 2010, durante una conferencia que brindó el estadounidense en Colonia, Uruguay, sobre señales químicas de C. elegans, para la Asociación de Ecología Química. Desde entonces Zavala se interesó en que el experto expusiera los resultados de sus investigaciones en la Argentina y que ofreciera capacitaciones, y fue él quien impulsó el otorgamiento de la beca que brinda la Fundación Fulbright.
Así, durante la visita a la Argentina, aprovecharon el encuentro para evaluar futuros colaboraciones entre proyectos científicos y tecnológicos de la Argentina y EE.UU. Edison también se mostró confiado en la posibilidad de generar un mayor intercambio, al destacar el prestigio que posee la UBA en el mundo y el valor de sus docentes y estudiantes, por su formación y su creatividad.