24 de Marzo de 2009 - Reflexión
EN EL DIA DE LA MEMORIA POR LA VERDAD Y LA JUSTICIA, me gustaría recordar a todos aquellos que a lo largo de nuestra historia, entregaron su vida al servicio de esta causa: LA VERDAD que ilumina nuestros aciertos y errores y LA JUSTICIA que nos obliga a hacernos cargo de nuestros errores y a repararlos.
Deseo recuperar el concepto de MEMORIA, no tanto para quedarnos anclados en el pasado sino para echar luz a nuestra realidad actual y poder esbozar ese modelo de República en la que los DERECHOS HUMANOS sean prioridad:
- el derecho a expresarnos libremente, a disentir y dialogar sin tomar al adversario como enemigo.
- el derecho a respetar la vida, y cuidarla desde la concepción hasta la vejez.
- el derecho a vivir en paz y a la seguridad de nuestra vidas.
- el derecho a una educación inclusiva y de calidad.
- el derecho a producir y a trabajar como medio de progreso, en lugar del subsidio.
- el derecho a la verdad de la información que proveen los organismos del Estado.
- el derecho a proteger el medio ambiente, y nuestro patrimonio cultural.
- el derecho a exigir transparencia y eficiencia en el ejercicio de la función pública.
- el derecho a una justicia ágil y ecuánime para todos.
- el derecho a la salud y a una vivienda digna.
Y muchos más derechos humanos....
En un día donde apelamos a la Memoria.....
¿Podremos pensar cómo integrar esta memoria a un proyecto de Nación?
¿Será una utopía la idea de una República basada en la constitución?
¿Podremos asumir nuestras diferencias, cicatrizar nuestras heridas y vivir reconciliados?
¿Podrá ganar la tolerancia a la violencia?
Recordemos los ideales republicanos de libertad, igualdad frente a la ley, fraternidad.
Sólo a través del ejercicio republicano, construiremos una verdadera democracia.
Necesitamos de la verdad, de la coherencia entre el decir y el hacer, del respeto por el otros, del ejercicio pleno de la justicia, para asegurarnos que tantas muertes injustas y tanto sacrificio de nuestros antecesores no fue inútil, que tuvo sentido para vivir hoy en democracia.
Miremos hacia adelante, que la memoria nos impulse hacia un espíritu de grandeza y reconciliación, necesario para construir una nación donde todos estén incluidos, la Nación Argentina que deseamos nosotros y soñaron nuestros abuelos.
Lorenzo R. Basso
Decano