Joven investigador de FAUBA se suma a grupo científico de la FAO

El Lic. Julián Monkes formará parte del grupo “Better Environment” del Foro Mundial de la Alimentación. Durante dos años, representará a la UBA y a la Argentina aportando recomendaciones técnicas y académicas para fortalecer políticas públicas vinculadas al desarrollo ambiental sostenible.

El Licenciado en Ciencias Ambientales y docente de la Facultad de Agronomía de la UBA (FAUBA), Julián Monkes, fue seleccionado para integrar el Grupo de Jóvenes Científicos del Foro Mundial de la Alimentación, una iniciativa impulsada por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). Durante dos años, Monkes participará como representante argentino en el eje temático “Better Environment”, uno de los cuatro grupos de trabajo del programa, junto a jóvenes profesionales de Italia, Líbano, Brasil, Nepal y Nigeria.

El Grupo de Jóvenes Científicos funciona como un comité asesor del Grupo de Juventudes de la FAO, encargado de redactar informes, formular recomendaciones de políticas públicas y coordinar acciones en distintas regiones del mundo. “Nosotros damos sustento académico y técnico a esas propuestas. Por ejemplo, en América Latina los objetivos están enfocados en la seguridad alimentaria y el protagonismo de comunidades indígenas y campesinas”, detalló.

La iniciativa seleccionó a 23 jóvenes investigadores de distintos países, priorizando la diversidad geográfica y la representación regional. Cada uno fue asignado a uno de los cuatro ejes del programa: Mejor Ambiente, Mejor Nutrición, Mejor Producción y Mejor Vida. 

Según contó Monkes, la selección constó de tres etapas. “Primero se evaluaba la documentación: currículum, carta de intención y una recomendación, que en mi caso fue firmada por la decana de la FAUBA. Luego se analizaba el perfil académico y la relevancia de las líneas de investigación en relación con las temáticas de la FAO. Por último, una entrevista oral en inglés, donde se debía justificar el interés en participar y qué aportes se podían hacer”.

En octubre se presentarán los primeros borradores de informes con recomendaciones destinadas a fortalecer el rol de la juventud en estos temas ante gobiernos y organismos internacionales. El trabajo del grupo se extenderá hasta fines de 2026, con una presentación final prevista para 2027.

“Mi aporte estará centrado en cómo implementar medidas, acciones y recomendaciones que mejoren el protagonismo de la juventud en los diferentes territorios del sur global”, señaló Monkes, quien destacó que su designación no fue un logro individual. “No me postulé solo, fue gracias a colegas con quienes compartimos espacios como la Cátedra Libre de Soberanía Alimentaria. Si bien hay una persona y un nombre, lo que me sostiene es una construcción colectiva que caracteriza a la FAUBA”. 

Finalmente, Monkes subrayó la importancia de contar con representación argentina en estos espacios globales de toma de decisiones, especialmente en un contexto de recorte presupuestario a la universidad pública y al sistema científico tecnológico nacional: “Participar en la FAO significa abrir caminos, establecer lazos internacionales y generar oportunidades para otros/as investigadores/as de la Facultad. Además, es muy importante que la UBA tenga un pie en lugares como la FAO, en un contexto muy difícil de restricción económica y de desfinanciamiento a las universidades públicas. Abrir otros canales para conseguir proyectos, seguir produciendo resultados académicos y seguir teniendo lazos internacionales de importancia, me parece que es una forma de resistir a estos momentos de ataque al sistema universitario nacional”.