Docentes fueron premiados por la Fundación Banco Galicia
En su sexta edición del Fondo para la Conservación Ambiental, Mariano Devoto y Gonzalo Irisarri se llevaron un reconocimiento por sus proyectos relacionados a las Prácticas Agropecuarias Sustentables.
Anualmente, el Fondo para la Conservación Ambiental de la Fundación Banco Galicia premia proyectos de investigación y gestión que busquen la conservación ambiental y el desarrollo sustentable del país. En esta oportunidad de 121 proyectos presentados, los docentes de la Facultad de Agronomía de la UBA Dr. Mariano Devoto y Dr. Gonzalo Irisarri fueron premiados por sus trabajos de investigación relacionados a las "Prácticas Agropecuarias Sustentables".
El proyecto del Dr. Devoto, ingeniero agrónomo e investigador del CONICET, se tituló "El rol de los bordes de cultivo en la conservación de la biodiversidad en agroecosistemas. Un enfoque estructural y funcional". “Esperamos que el proyecto revele la importancia de los bordes de cultivo como reservorios de biodiversidad de plantas con flor y sus visitantes, y también permita identificar aquellos atributos estructurales y de manejo que inciden sobre la estructura y el funcionamiento de estos refugios de biodiversidad. El proyecto generará conocimientos en base a los cuales orientar las políticas públicas, los incentivos financieros y los paquetes tecnológicos actuales hacia la conservación de los polinizadores en los agroecosistemas”, aseveró.
Por su parte, el Ing. Agr., Msc en Recursos Naturales y Dr. en Ciencias Agropecuarias, Gonzalo Irisarri fue ganador con el proyecto "Conservación de los mallines patagónicos: variación de la productividad forrajera y de la invasión por plantas exóticas".
“El trabajo tiene por objetivo principal profundizar nuestro conocimiento en los sistemas de mallines de la Patagonia extra-Andina. Los mallines son ambientes relativamente pequeños que por su posición en el paisaje, colectan el agua circundante. En un contexto de aridez, como es el de la Patagonia extra-Andina, estos ambientes producen hasta diez veces más que las áreas de estepa, y por ende, determinan la capacidad productiva ganadera de los establecimientos agropecuarios. Además son el foco de atracción de diversas especies nativas, desde aves hasta mamíferos grandes (guanacos)”, explicó.
Ambos investigadores recordaron al Prof. Rolando León y lo homenajearon con la dedicatoria de este premio, que contó con el apoyo institucional de la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación y la Administración de Parques Nacionales.
“Fue emotivo recibirlo en un momento tan sensible para la comunidad de la FAUBA. Tuve el privilegio de aprender del Prof. Rolando León como alumno de grado y posgrado, y de formarme en la EPG con muchos de sus discípulos, así que me siento honrado de llevar adelante este proyecto en un lugar (San Claudio) que él tan bien conocía y en que su legado está tan presente”, contó Mariano. En el mismo sentido, Gonzalo dijo: “Toda mi formación la realicé acá en la Facultad, junto a Martín Oesterheld. También tuve y tengo la oportunidad de trabajar cerca de José Paruelo y Rodolfo Golluscio. Ellos tres han sido mis guías en mi formación. Me tomo el atrevimiento de homenajear a Rolando León. Soy discípulo de sus hijos académicos, y por lo tanto todo esto que acabo de contar solo es posible gracias a él”.
Y para cerrar, cada uno de los docentes de la Facultad expresó su visión personal y profesional de la importancia de haber ganado el reconocimiento de la Fundación Banco Galicia.
“Es una gran satisfacción ver que hay un creciente interés por temas a los que la investigación agronómica tradicional tal vez no había dedicado tanta atención, pero que son fundamentales en el contexto de los cambios profundísimos que ha sufrido la producción agrícola en la región pampeana en décadas recientes. En lo profesional, mirando hacia el pasado, me reconforta que se confíe en la capacidad de llevar adelante este proyecto de nuestro grupo, que tiene una línea de investigación bien establecida en el estudio de la polinización en ambientes naturales y agroecosistemas. Mirando hacia el futuro, me alegro mucho por la oportunidad que este apoyo representa para los alumnos de grado y posgrado que se interesan por estos temas y que están iniciando o perfeccionando su formación en nuestro grupo”, aseveró Devoto.
“En lo personal, recibir esta distinción me pone muy contento porque el reconocimiento viene de personas con una amplia trayectoria, como son los jurados de esta convocatoria. Desde el punto de vista profesional, este premio representa una gran ayuda para iniciar mi carrera como investigador del CONICET dentro de la Facultad. Además, poder establecer sitios de experimentación de largo plazo con un protocolo común a otros sitios de la Argentina y del mundo representa un aspecto poco común en nuestra ciencia y de gran valor por las comparaciones que permite realizar”, afirmó Irisarri.